¿Qué es la ley de la segunda oportunidad?
La Ley de Segundas Oportunidades es un mecanismo introducido en la Ley Concursal de 2015 (reformada por última vez en 2022) que habilita a las personas físicas (particulares, autónomos, profesionales y comerciantes) que no puedan hacer frente a sus obligaciones periódicas de reembolso, puedan resolver sus problemas financieros y obtener la condonación de su deuda en los tribunales.
Con la ley de las segundas oportunidades, las personas buscan a aquellas personas que, a pesar de los fracasos personales o comerciales, puedan comenzar sus vidas de nuevo sin arrastrarse interminablemente a deudas que no pueden pagar.
¿Quién puede acogerse a la ley de la segunda oportunidad?
Persona física (particular, empresario individual, comerciante o comerciante) que no puede o espera no poder cumplir regularmente con sus obligaciones de pago (concurso de acreedores) y cumplir con los requisitos establecidos por la ley como deudor de buena fe.
¿Cuáles son las segundas opciones para usar la ley?
Las personas en bancarrota deben iniciar directamente el procedimiento legal del acreedor (la reforma de bancarrota en 2022 ha revocado la fase anterior del acuerdo de pago francés). Si una persona cumple con los requisitos para ser un deudor de buena fe, puede solicitar al juez de quiebras un cobro de deudas pendientes o EPI (condonación de deuda descargada). La ley permite dos vías:
- Hay exención del plan de pago y no acción de liquidación (lo que permitiría mantener la vivienda familiar).
- Descarga directa de responsabilidad por liquidación de bienes personales (si se liquida algún bien).
¿Por qué necesitas un abogado?
Cada caso es diferente y puede tener detalles que necesitan ser analizados adecuadamente. Por eso es importante obtener el asesoramiento de expertos antes de iniciar el proceso. Y una vez se alcanza la fase de concurso su intervención es obligatoria.
¿Y qué pasa con las deudas?
Pues las deudas desaparecen, y el deudor ya no deberá nada a nadie.
Eso no quita que se trate de un proceso largo y difícil de soportar, pero la recompensa vale la pena.